El emblema de la compañía Ubisoft ha vuelto. Atrás quedan aquellos juegos protagonizados por los endiablados Rabbids que a más de uno robó el corazón por su característico y personal carácter. Rayman ha vuelto por la puerta grande tras pasar unos años a la sombra, y lo ha hecho mejor que nunca. Rayman Origins es el retorno a lo clásico, al género donde este personaje vio la luz a finales de los 90.

Un plataformas que redefine el género de manera soberbia

Tras muchos dimes y diretes en los cuales el desarrollo de este título daba bastantes bandazos (estuvo a punto de no salir tras considerar, en un primer momento, su venta en formato digital y por episodios), Michael Ancel, padre de la simpática criatura, tomó el camino correcto: prefirió tomarse un tiempo para perfeccionar y unir las piezas de un puzle de semejante magnitud para el que es, posiblemente uno de los mejores plataformas de esta generación (con permiso del orondo fontanero de Nintendo).

Vuestros ojos presenciarán una obra que roza un delirio sin precedentes: su apartado artístico, su música, sus niveles perfectamente creados… todo en el juego tiene un porqué y se nota el excelso mimo con el cual la compañía franco-canadiense ha querido corresponder a su buque insignia.

Este título creado con el motor gráfico UbiArt Framework (capaz de dotar a los desarrolladores total libertad para poder crear fácilmente mundos de ensueño en cualquier plataforma) dota al juego de una personalidad única, irrepetible y que os quedará grabada en vuestra retina nada más empezar a jugar, con una estética de dibujo animado que dejará atónito a más de un jugador avezado o al jugador menos dado a ello.

La sencillez es la clave del éxito

Si ya de por sí os impactará su estética, su simpleza también os atrapará. Rayman y sus amigos están plácidamente echando una siesta cuando, en el inframundo, el sonido del placer es molesto. Dichos ronquidos harán que una horda de enemigos ataquen y, finalmente, sean apresados por cometer semejante tropelía. ¿Quién será el que desmantele otra vez el plan de sus enemigos y reine la paz en el mundo de los sueños? Evidentemente, nuestro amigo sin extremidades, Rayman.

El juego se divide en varios mundos temáticos en los cuales deberéis de completar la misión de ir rescatando y recolectando lums a la vez que, en una carrera en pos de la supervivencia, ir recogiendo una especie de dientes dorados de un baúl que os propondrá un reto alocado. No sólo eso, también tendréis fases de vuelo comandadas por un viejo conocido de la saga, Mosquito, para dar algo de variedad y dinamismo al título.

Su apartado jugable es muy sencillo, al igual que el resto de apartados, con muy pocas teclas o botones seremos capaces de dar saltos y atacar, aunque requerirá mucho de vuestra pericia en ciertos momentos de la aventura.

Es posible jugar tanto en solitario como en un modo alocado de hasta cuatro jugadores (en una misma consola u ordenador de sobremesa, sin opciones online) que nos recordará mucho al genial New Super Mario Bros. aparecido en Wii: podréis cooperar, fastidiar a vuestros amigos… pero eso jamás importará, la diversión y las risas están más que aseguradas.

Rayman ha vuelto para quedarse, no será la última

En definitiva, Rayman Origins es un juego de plataformas clásico que redefine y actualiza el género de manera muy fresca e inteligente.

Jugar a este juego significará estar presenciando uno de los mejores títulos de plataformas que jamás habréis visto. Todo, desde su apartado artístico, su apartado jugable y las numerosas horas que os dará el juego, son motivos más que suficientes para darle una oportunidad al bueno de Rayman.

Él te está esperando para divertirse contigo. ¿A qué esperas? En el horizonte os espera Rayman Legends.

Análisis de la versión para PC, Nintendo Wii, Xbox 360 y PlayStation 3. También disponible para Nintendo 3DS y PS Vita.

Rayman Origins ~ Gameplay